sábado, 9 de septiembre de 2017

Más cerca de los compañeros que se jubilan por edad (con o sin júbilo, con melancolía o sin ella) que de las muchachas y muchachos que llegan al claustro con su ultimísimo ingenio ultraligero de manzana con mordisco bajo el brazo; más cerca del libro de papel y del referente humano (dentro y fuera del aula) que de la sofisticación informática que todo lo desalma, lo devora y lo vomita.

No hay comentarios: